miércoles, 29 de septiembre de 2010

Micmacs: Un Plan de Locos (Micmacs, 2009)

Recomendada para: Público en general, fans de Jean-Pierre Jeunet y quienes gustan de la buena comedia y no el pastelazo gringo.
No recomendada para: Esnobs que piensan que el cine francés = Amélie y esperas ver algo similar porque el director es el mismo.
Seguramente ya lo había comentado o ustedes lo habrán notado (siempre y cuando sean asiduos lectores de este blog) con anterioridad: detesto a Francia, a los franceses, el idioma francés y prácticamente cualquier cosa que tenga que ver con ellos. Pero incluso en esto de detestar existen excepciones, un par de películas y de actores/actrices quedan exentos de mi desprecio. No me atrevería a decir que el director Jean-Pierre Jeunet sea una de esas excepciones, pues aunque en su haber se encuentra la "aclamadísima" Amélie (es muy buena pero tampoco es la octava maravilla), también hay cosas bastantes nefastas como la 4ta entrega de Alien o el bodrío aquel de La Ciudad de los Niños Perdidos. Después de un largo periodo de descanso, Jean-Pierre regresa al cine con la que bien podría ser su mejor película y que definitivamente sí entra a mi lista de excepciones francesas. Se nota que esos 5 años en los que estuvo alejado del cine le ayudaron bastante.

Bazil (Dany Boon) es un hombre al que la vida no ha tratado muy bien. De niño, su padre murió en Marruecos debido a la explosión de una mina terrestre. Como adulto, una bala pérdida se ha incrustado en su cráneo, razón por la cual tiene que ser hospitalizado y para cuando es dado de alta, ya ha perdido tanto su empleo como su hogar. Después vagar sin rumbo por días, Bazil es adoptado por una "familia" de vagabundos con habilidades inusuales que sobreviven de lo que pueden rescata de los basureros: una chica que es una calculadora viviente, un etnólogo, un hombre bala, un inventor, una contorsionista, etc. Por azares del destino, un día mientras recorre las calles en busca de basura, Bazil se topa con las dos empresas responsables de su miseria. El momento de la venganza ha llegado y con la ayuda de su nueva "familia", pondrá en marcha un grandioso plan para lograrlo.

La película es muy buena y esto se debe a que el guión es excelente. Si vieron Asesino a Sueldo (Lucky Number Slevin) la trama les resultará conocida, si no es que casi idéntica salvo por el gran elemento cómico al que Jeunet recurrió para su cinta. Éste es precisamente el punto más fuerte de la película, un sentido del humor tan inocente y "buena ondita" que no necesita de groserías, chistes sexuales o golpes en los genitales para tener a la audiencia atacada de risa. Al elemento de comedia hay que sumarle una serie de ideas muy ingenionsas a las que el protagonista recurre para llevar a cabo su plan. En cuanto al ritmo, debo decir que en los primeros 20 minutos no está muy claro hacia donde pretende ir la película, si se trata de algo serio o no, pero afortunadamente en este punto las cosas comienzan a cobrar sentido y el tedio se termina. Por si fuera poco, la cinta critica de una forma sutil a la industria armamentista, muy al estilo de como lo hace Hombre Peligroso (Lord of War), aquella película en la que Nicolas Cage era un traficante de armas.

Las actuaciones son bastante buenas, aunque tampoco son una revelación. Dany Boon se lució con su personaje, Bazil, con quien el público simpatiza de ¡nmediato y se mantiene así hasta el final de la película. André Dussollier y Nicolas Marié interpretan a los dos malos del cuento, los empresarios ambiciosos, corruptos y sin escrúpulos a los que sólo les importa aumentar las ganancias de sus companías. Las similitudes y diferencias entre los personajes de ellos dos resulta bastante interesante y aporta muchísimo al desarrollo de la historia. Del resto del reparto no hay mucho que decir, todos los personajes son excéntricos a su manera y es esta misma excentricidad lo que los hace indispensables para el plan de Bazil. El reparto lo integran Jean-Pierre Marielle como el ex-convicto, Yolande Moreau como la cocinera, Julie Ferrier es la contorsionista, Omar Sy el etnólogo, Dominique Pinon es el hombre bala, Michel Crémadès el inventor (el mejor de todos estos a mi parecer) y Marie-Julie Baup como la calculadora humana.

En conclusión, Micmacs es una gran película que cumple por completo su propósito de ser divertida y entretenida. Si bien a momentos nos recuerda un poco a Amélie (en la parte visual y la música) no hay que cometer el error de comparalas entre sí, pues no tienen nada que ver en cuanto a historia y narración. Lamentablemente la cinta no duró mucho tiempo en cartelera, así que les recomiendo que en cuanto puedan la compren o renten, les garantizo que no se arrepentirán.

ADVERTENCIA: Los siguientes párrafos contienen información esencial acerca de la trama de la película.

Me latió:

1. El sentido del humor que la película maneja. Se trata de un humor muy inocente, que recurre a las locuras y a la excentricidad como elementos para hacer reir a la gente. Situaciones que, guardando proporciones, parecieran que fueron planeadas por el Dr. Chun-Ga (el extraordinario personaje de Andrés Bustamante).

2. La rivalidad entre los dos empresarios, que se odian a más no poder pero coexisten sin hacerse daño el uno al otro, hasta que Bazil entra en sus vidas por supuesto.

3. Las creaciones del inventor que son de ese tipo de máquinas con mecanismos que parecen complejos pero que en realidad realizan una función muy sencilla. Además, el inventor es como un Geppetto pero afrancesado, osea muy chistoso.

4. La parte final del plan de Bazil, que consistió en "secuestrar" a los dos empresarios y hacerles creer que se encontraban en el medio oriente, a punto de ser ejecutados por las familias de las víctimas de las armas que fabrican. Aquí es donde la crítica a esta industria se hace muchísimo más presente.


No me latió:

1. ¿Qué onda con los anuncios dentro de la película que la promocionan a sí misma? La neta yo no entendí el sentido de hacer esto, me resulto más bien extraño e innecesario.

2. Salvo Bazil y los dos empresarios, el desarrollo de personajes es mínimo si no es que nulo.


1 comentario:

Ana Sthal dijo...

¿cómo que Amelié está dos tres? no manches!!!! Amelié rocks! :P, tiene a Audrey Tautou que es la onda y la música de Yann Tiersen, priceless!